Las sierras de calar tienen algunos secretos que hacen en muchas ocasiones no obtengamos el resultado que esperábamos en nuestros proyectos. Algunos problemas muy habituales a la hora de utilizar la sierra de calar son que la hoja se desvía, la madera se quema, la caladora no corta bien cuando entra en contacto con el material. Hoy hablaremos sobre como prevenir o solucionar estos problemas y sobre como deberíamos utilizar correctamente la caladora.
Para comenzar deberíamos saber cuáles son los puntos más importantes de las sierras de calar. El punto más importante de la caladora es la potencia del motor. Si una caladora no tiene la potencia suficiente no va a poder cortar los materiales de forma eficaz, sobre todo si queremos cortar a poca velocidad. En este caso la sierra de calar se atascará por falta de potencia. Es muy común quemar la hoja y el material a la hora de cortar con una sierra de calar con poca potencia, por que al ver que no corta, aumentamos la velocidad e incrementamos la fricción.
El segundo punto importante de la sierra de calar es la dureza del brazo y de su émbolo. Si el brazo no es fuerte, a la hora de forzar el trabajo de cortar podemos deformarlo y partirlo. La palanca del rodillo también es un punto muy importante para que una caladora funcione bien, ya que da apoyo a la hoja para cortar recto y crea el vaivén de la hoja. Si la palanca del rodillo no funciona, la hoja no cortará recto. La elección de la hoja debe hacerse bien. Si el material es demasiado duro para la hoja, esta no cortará correctamente.
Ventajas de las sierras de calar
Una sierra de calar que te recomendamos es nuestra sierra de calar electrónica de 800w y 3000rpm. Esta sierra tiene un sistema patentado de cambio automático sin llave con hojas con vástagos. La ventaja principal es que la vibración a la hora de cortar será mínima gracias a su mecanismo antivibración. Además, tiene 4 posiciones y su arranque es muy suave, por lo que a la hora de cortar el comienzo del corte será limpio, correcto y preciso.
Las caladoras básicas y de poca calidad se calientan, queman el material y la hoja y además no cortan de forma tan precisa. Imagina comprar una madera cara y equivocarte a la hora de cortar. Mejor disponer de una buena caladora antes de estropear el material. Si el material no es tan duro y es simplemente de aglomerado, abeto o pino, no necesitarás precisamente una caladora de mucha potencia.
Por lo tanto, podemos decir que la mejor máquina no es la que más potencia tenga o la más cara, sino la que mejor se adapte al trabajo que queremos realizar. Escoge una gama más alta si quieres realizar cortes más exigentes. Pero si vas a usar la sierra de calar en materiales blandos y la vas a usar pocas veces, puedes optar por una gama más baja. Una buena máquina es también aquella que tiene la vida útil acorde a la cantidad de veces que la vamos a utilizar.